Miscelánea dominguera

(Foto: AFP/http://www.elmundo.es/elmundodeporte/2012/12/05/masdeporte/1354735557.html)

Cualquier persona se levanta un domingo por la mañana y tiene multitud de pensamientos en su cabeza. A mí me pasa habitualmente y, cuando esos pensamientos son sobre cuestiones deportivas, los junto todos en un post, que se podría llamar por ejemplo 'Miscelánea dominguera', y me pongo a escribirlo en cuanto tengo tiempo. Allá voy:


1. En serio, hay un tipo en España, periodista, casi seguro; que se dedica única y exclusivamente a poner motes a los actores (presidentes, entrenadores, jugadores, pilotos, ciclistas y demás) del deporte mundial. Ese mismo tipo, que ahora no recuerdo quién es, fue el que utilizó la comparación entre Sherlock Holmes y el Profesor Moriarty para comparar a Guardiola (Holmes) y Mourinho (Moriarty). De verdad, ¡es brutal esa comparación! No sé si están familiarizados con los personajes de Arthur Conan Doyle, pero es prácticamente imposible que encuentren un malo mejor que el profesor Moriarty en la historia de la literatura. Matemáticamente (guiño friki para los conocedores del personaje) imposible.

Y, en realidad, la relación entre Guardiola y Mourinho siempre tuvo mucho de la relación entre Sherlock Holmes y James Moriarty. Sin entrar a valorar cuál de los dos tendría el papel de bueno (cada persona tendrá su opinión), Mourinho tiene cualidades de Moriarty, la némesis de Holmes. Es calculador e inteligente. Es capaz de sacar lo mejor de sus seguidores. Y siempre obliga a sus rivales, Holmes, Guardiola, Vilanova o el Papa de Roma, a tener que ir hasta el infinito de sus cualidades para poder derrotarlo. Tal y como hizo Moriarty con Holmes hasta las Cataratas de Reichenbach. Mérito de Holmes, pero también de Moriarty, dos genios que mejoraron sus habilidades merced a su disputa.

2. El mismo tipo que llamó Moriarty a Mou debió ser también el que empezó a llamar Anquelotti a Anquela. Si la comparación Mou/Moriarty me apasiona, la comparación Anquela/Ancelotti no me gusta nada. Poco, realmente poco, tienen que ver el entrenador linarense con el 'allenatore' italiano. Seré sincero con Anquela: para mí es el entrenador de fútbol que más me ha gustado en los últimos cinco años. Por culpa de mi trabajo (y también por placer), he visto muchos partidos de Segunda División B, Segunda y Primera en los últimos años, y Anquela es probablemente el entrenador que más me ha llamado la atención por sus méritos y forma de jugar en relación con la calidad y el precio de sus jugadores. Creó un equipo asombroso (dominador, organizado, contundente, físico, entregado, asociativo, veloz, con capacidad de recuperación y un largo etcétera) en Segunda División B, lo mantuvo en Segunda División sin cambiar ni efectivos ni filosofía (mérito también para el director deportivo del Alcorcón) y casi lo asciende merecidamente a Primera. Tras dejar el Alcorcón, Anquela, a sus 55 años, disfruta por fin de la máxima categoría del balompié nacional con el Granada, pero el mal arranque del equipo (está en posiciones de descenso) hace peligrar su puesto. En cualquier caso, ayer mismo, tras caer goleado en Málaga, su presidente Quique Pina aseguró que Anquela seguiría como entrenador. Yo, por mi parte, mostraré mi opinión con la misma máxima de siempre: Nick Hornby responde por mí.

3. Después de Anquelotti, a ese tipo se le ocurrió que a Carlos Terrazas se le podría llamar Terry, como el defensa central del Chelsea. No veo acertada la similitud más allá de la idea de hacer inglesa una palabra castellana, pero me sirve para contextualizar la goleada del Deportivo Guadalajara ayer ante el Numancia de Soria. He leído en muchos sitios que fue una oda al contraataque y, sin dejar de estar de acuerdo del todo, para mí realmente fue una oda al juego al primer toque. Como los pases de Erice en el primer y tercer gol o la combinación de Álex García, Álvaro Antón y Vicente en el quinto y definitivo gol morado. Un pensamiento que me lleva a dejar una pregunta al aire, para que cada uno de los lectores de este post la valore de la forma que considere oportuna. Ahí va: ¿sabían que el equipo alcarreño entrena de forma recurrente cada semana ejercicios en espacios reducidos para mejorar la presión defensiva y aumentar el juego asociativo al primer toque? Es verdad que el equipo guadalajareño hace ese tipo de ejercicios y la pregunta la he dejado yo en el aire. Ahora que cada uno saque la conclusión que quiera sacar.

4. Al tipo ese le quedaron ganas de seguir poniendo motes y a las jugadoras de la selección española de balonmano femenino las llamó Las Guerreras. Más allá de lo obvio del término, utilizado continuamente por todos los periodistas deportivos, yo el primero; el término sí que sirve para determinar el espíritu de esa gran generación de jugadoras de balonmano. Ahora, Las Guerreras están disputando el Europeo en busca de la cuarta medalla de su historia y seguro que lucharán hasta la extenuación por conseguirlo, es una de sus señas de identidad. Pero hay un dato que llama poderosamente la atención: de las dieciséis convocadas, únicamente cuatro (Cristina González, Eli Pinedo, Vanessa Amorós y Patricia Elorza) juegan en equipos españoles. El resto, incluidas Silvia Navarro, Carmen Martín, Begoña Fernández, Macarena Aguilar, Marta Mangué o Beatriz Fernández, han tenido que emigrar al extranjero (la mayoría recientemente) para poder desarrollar su carrera deportiva. Esa es la realidad de este país. La realidad de todos los deportes, masculinos o femeninos, excepto el fútbol masculino; y la realidad de todos los jóvenes españoles.

Piensen en ello. Tienen todo el domingo por delante para poder pensar en ello.